PERFIL DEL ALUMNO

El estudiante del Colegio San Ignacio es una persona reflexiva con una alta
capacidad de autocrítica y liderazgo, perseverante, responsable y disciplinado,
capaz de resolver los conflictos que se le presentan, de manera ecuánime, pacífica
y democrática, superponiendo el bien común por sobre sus intereses personales.
Acepta a sus pares como legítimos otros, respetando y valorando sus diferencias y
entendiéndolas como un pilar para construir en sociedad.
Es capaz de enfrentar los desafíos y asumir los errores como oportunidades
de crecimiento y aprendizaje, reconociendo fortalezas y potencialidades en sí
mismo como en los otros. Demuestra confianza y respeto a la autoridad,
reconociéndola como un principio básico para convivir.

El estudiante sanignaciano posee iniciativa, pensamiento flexible y practica
la escucha activa como habilidades fundamentales para tomar acuerdos. Asimismo,
prevalece en ellos la importancia del trabajo colaborativo en la formación de su
propia individualidad, entendiendo que sus talentos y habilidades deben estar al servicio de la comunidad y su entorno, para contribuir al bienestar de todos.

PERFIL DEL PROFESOR

El docente del Colegio San Ignacio es un líder positivo, confiable y de una ética
profesional intachable, conoce, adscribe y promueve el PEI. Es modelo de los
principios institucionales, fomenta y practica la resolución pacífica y democrática de conflictos, cree en el ser humano y sus potencialidades, valorando el esfuerzo de todos.
Trabaja arduamente en el desarrollo de valores como el respeto, responsabilidad, solidaridad, autonomía, tolerancia, empatía y honestidad, tiene capacidad de autocrítica y propicia el pensamiento flexible, tanto en su actuar como en el de sus estudiantes, comprendiendo la importancia de este en la sociedad actual.
En su quehacer pedagógico, siempre está atento a las necesidades y cambios de
sus estudiantes, guiándolos para que sean protagonistas de su proceso formativo.
Trabaja para desarrollar habilidades y superar con éxito los desafíos, enfrentando el error como oportunidad de aprendizaje e invitándolos a reflexionar sobre sus experiencias. Potencia el pensamiento crítico en un ambiente respetuoso, inclusivo, organizado, positivo y de alta exigencia, promoviendo el desarrollo personal y social de los educandos, favoreciendo el bienestar necesario para el ejercicio de la ciudadanía y la vida democrática, cuidando el medio ambiente y la valoración por la diversidad.
Conoce, maneja y cumple con los elementos curriculares de la disciplina que
imparte, se preocupa de su aprendizaje profesional continuo, diseña experiencias de aprendizaje innovadoras que desarrollen un aprendizaje profundo, estableciendo metas y objetivos desafiantes e incentivando el conocimiento creativo y autodidacta a través del trabajo colaborativo.

El docente sanignaciano acepta y cree en la cultura institucional existente,
cumpliendo cabalmente con sus obligaciones contractuales y administrativas,
contribuye en la construcción de un espacio seguro, cercano y armónico para los niños, niñas y jóvenes, manteniendo un trato formal y respetuoso con todos los miembros de la comunidad. Es conocedor de la normativa legal vigente y de la institucional, validando y respetando las normas de convivencia y las de
funcionamiento del establecimiento.

PERFIL DEL APODERADO.

La familia sanignaciana está conformada por personas conscientes de sus
responsabilidades como formadores, que adscriben y valoran al proyecto educativo de nuestro colegio, expresándolo a través del modelamiento y promoción en sus hijos tanto del pensamiento reflexivo, como la capacidad de autocrítica y el liderazgo, así como también los valores del respeto, la responsabilidad, solidaridad, autonomía y tolerancia; incentivando la resolución de conflictos de manera pacífica y democrática, contribuyendo al desarrollo del bien común y valorando las diferencias como una oportunidad de aprendizaje.
Se reconoce a sí misma como primer formador de nuestros estudiantes,
comprometiéndose a colaborar y a apoyar con el desarrollo de su pupilo, validando y dándole importancia al ambiente de alta exigencia, puesto que comprende que este tributa en la formación de líderes positivos para ser un aporte a su entorno, demuestra confianza y respeto a la autoridad y la reconoce como un principio básico para convivir.
La familia sanignaciana cree en la cultura institucional, cumple con sus
compromisos y favorece la construcción de un espacio seguro, cercano, estimulante y armónico para sus niños, niñas y jóvenes, compartiendo los valores y principios del colegio. Es conocedora de la normativa legal vigente y respeta las normas de convivencia y las de funcionamiento del establecimiento, brindando un trato respetuoso a todos los integrantes de la comunidad y haciéndose parte del proceso educativo.